I was raised in Bolivia, as a missionary kid. It might appear to be a severe sort of life, with few of the comforts that we expect these days, but the rewards far outweighed any hardship. I was exposed, daily, to cultures, languages, and ideas completely foreign to a North American setting. The gift of living surrounded in a native tradition, which I experienced as very nourishing, gentle and rich, continues to inspire my art and my life. I have come away with no regrets, and so much gratitude for a childhood that prepared me for a life of flexibility, simplicity,and service.
My parents taught me that service to others is the highest and most rewarding calling. Even when we considered ourselves poor-as-church-mice, in Bolivia there were always people in far greater need. My mother was very clear about giving free meals to every street child she met, and endless healthcare to anyone who showed up at the clinic. A regular form of payment for her services might be a stock of bananas, a live chicken, or a half dozen eggs wrapped in corn husks. She was grateful for whatever showed up.
Another gift my parents gave me was the ease of travel. I think we headed out on my first adventure within days of my birth, and throughout my childhood, we never really stopped moving and traveling. As an adult, my desire to always see what’s around the next corner, or in the next valley, or country has spurred my love of photography into a genre of “still documentation”. To distill this even further, I might add that I love exploring and photographing rural life in less developed countries. I am fascinated with the rituals of a simple life, and every village has their own unique traditions and style.
Currently, I live in Arroyo Seco, just outside of Taos, with my wonderful husband Jim. He, so generously travels with me as I am spurred by my passion for travel and photography. Rarely does he complain about being cajoled into visiting yet another country and experiencing the hardship of rustic travel to the outbacks of a new and wild frontier!!
VISION STATEMENT
I have a vision of peace on Earth. Through my experiences and travels, I’ve come to recognize that people everywhere share that same vision. My goal is to strengthen this vision by sharing the beauty of all cultures and people, celebrating our amazing diversity, and all our incredible similarities of the heart. We truly are One Family!
En español:
Yo me crié en Bolivia, como hija de misioneros. Aunque hubo pocas de las comodidades de la vida cotidiana que hemos llegado a esperar, las recompensas de esa experiencia resultaron ser de mas valor que cualquier dificultad. Estaba expuesta a diario a las culturas, lenguas e ideas completamente ajenas al entorno de América del Norte. El don de vivir rodeada de una tradición nativa, la cual consideré ser como muy nutritiva, suave y enriquecedora, sigue inspirando a mi arte y mi vida. He vivido sin remordimientos, y con tanta gratitud por una infancia que me preparó para una vida de flexibilidad, sencillez, servicio, y el dominio.
Mis padres me enseñaron que el servicio a los demás es la vocación más alta. Incluso cuando nos consideramos muy pobres, en Bolivia siempre había personas mucho mas necesitadas. Mi madre creía firmamente en dar comida gratis a todos los niños hambrientos que llegaba a conocer, y un sinfín de atención médica a cualquier persona que se presentaba en su clínica.
Otro regalo que mis padres me dieron fue la facilidad de viajar. Salimos de mi primera aventura dentro de unas semanas de mi nacimiento, y durante mi niñez, en realidad, nunca dejamos de viajar. Como adulta, mi curiosidad de ver siempre lo que está a vuelta de la esquina, o en el valle, o país siguiente, ha stimulado mi amor de la fotografía en un género de documentación. Para extraer de esa aún más, debo añadir que me encanta explorar y fotografiar la vida rural en países en via de desarrollo. Me gusta sentarme con la gente, muchas veces sólamente comunicando a través de gestos con las manos y la risa. Estoy fascinada con los rituales de una vida sencilla, y cada pueblo tiene sus propias tradiciones y estilo únicos.
Actualmente, vivo en Arroyo Seco, Nuevo Mexico en las afueras de Taos, con mi esposo Jim, y una hija adolescente Prisma, quienes comparten mi vida diaria. Son tan generosos al darme la libertad para realizar mi pasión por el viaje y la fotografía. Rara vez se quejan de ser arrastrados a todavía otro país y sufrir las dificultades de los viajes rústicos a una nueva frontera salvaje!
Esta colección se ha desarrollado sobre los años debido a mi compromiso de exponer la belleza de nuestra comunidad global, y es un trabajo en progreso.
Por favor visite mi sitio web para ver la colección ampliada.
Declaracíon Sobre mi Sueño
Tengo un sueño de paz en la Tierra. A través de mis experiencias y viajes, he llegado a reconocer que muchas personas, por todo el mundo comparten un sueño similar. Mi objetivo es fortalecer este ideal, por medio de compartir la belleza de todas las culturas y personas; celebrar nuestra diversidad extraordinaria y la similitud increible de nuestros corazones.
Realmente somos una gran familia!